29 de enero de 2010 - , , 1 comentarios

El día en que compré un llamador de ángeles

El otro día mientras visitaba a una amiga embarazada, me dí cuenta de que de su cuello pendía un llamador de ángeles. Ella me contó la historia y me gustó mucho. Lo más bonito era que los bebés mientras están en el vientre materno, escuchan el sonido del llamador y les tranquiliza una vez que estan en este, nuestro mundo.

Hoy me he comprado uno, por estética y porque me encanta ese sonido oculto que esconde tras de sí.

Por la mañana, he ido a visitar a la niña que ha traído al mundo mi amiga, y he pensado lo maravillosa que es la vida al tenerla en brazos. Y me da pena que no tengamos esa sensación de transición más a menudo, ese saberse "de paso" por esta existencia.
Disfrutar de cada momento, dar gracias cada día por las cosas que tenemos, ser felices, hacer cada uno de los actos cotidianos con amor...
Y al tener a ese bebé en brazos he sido feliz. Ella tan pequeña, con esas manitas minúsculas, esos ojos que se estan abriendo al mundo y tanta vida por delante.

Y como cada día es diferente al anterior, esta misma tarde me han comunicado la muerte de un familiar joven. Y he podido apreciar de nuevo lo pasajero de la vida.
Y he llorado por la familia de esa persona, por los hijos y la mujer que deja, y he llorado quizás un poco también por toda esa gente que viven muertos.

¿ Quién merece su vida ?
Sonríe, haz feliz a los demás y vive el momento

1 comentarios:

La Rosée du Matin 11 de abril de 2010, 11:58

Yo hoy he descubierto tu página, y agradezco que nos dejes post que nos llenen tanto como este.

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